A un paso.

Hoy, sentí tu cuerpo junto al mio y nuestros corazones galoparon juntos a la par, ya que, me abrazaste con fuerza y parecía que no querías soltarme, pero sin ganas me soltaste, bajaste tu mano hasta mi cintura, seguiste bajando hasta mi mano y la tomaste con ganas, solo te mire, sonreí como una niña y baje la mirada. Me soltaste, te llamaban, fuiste, y después no volviste. Teníamos que volver a sentarnos, me senté detrás de ti, solo podía ver tu espalada, con tu tatuaje y tu nuca que moría de ganas de abrazar, así que, coloque mis ante brazos en dos sillas y deje colgar mis manos entre medio de ambas, cuando lo notaste, hiciste, hiciste, hasta que llegaste a mi mano y la tomaste con fuerza. Estuvimos unos 15 minutos tomados de las manos, hasta que tuve que irme, y lo que dolió fue despedirme diciendote Adiós de desde lejos.